La historia oficial

Dic 23, 2018 La Quinta Pata Opinión Comentarios desactivados en La historia oficial

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Prof. José Figueroa

 

PASARON COSAS

Una imagen del genial Borges dice que un espejo simula estar lleno pero en realidad, está vacío[1].

La liberalización del mercado cambiario llevó el valor del dólar de $9,80 a $44, un incremento del 350% en los tres años de gestión macrista.

La devaluación de la moneda nacional superó el 120% en lo que va de 2018, convirtiéndose así en el país con la mayor devaluación monetaria del mundo.

La inflación de 2018 (que sería la más alta desde 1991) podría superar el 47,2% según el Banco Central. Desde que Macri asumió, la inflación acumulada va por el 158% (la 4ta más alta del mundo, después de Sudán) mientras que los salarios apenas lo hicieron en un 115% promedio.

El último informe del INDEC señaló una inflación del 3% (luego del 6,5% de septiembre). Los precios de los alimentos registraron un alza de casi un 90% en lo que va del año[2]. Los que más fueron golpeados por este incremento son los sectores sociales bajos que destinan el 53% de sus ingresos a la compra de alimentos[3].

El nuevo año comenzará con un techo paritario del 23%. El poder adquisitivo del salario real cayó 18,1% desde noviembre de 2015 y 15,4% en el último año. Se trata de la caída más profunda desde el año 2002.

La relación deuda/PBI pasó de un 13% a un 746%. El nuevo ciclo -inaugurado el 10 de diciembre de 2015-, cambió el eje del proceso de acumulación: vuelve a poner en el centro la valorización financiera y el endeudamiento externo (para enero próximo equivaldrá al 110% del PBI).  El endeudamiento externo bajo la alianza Cambiemos superó el de todos los años de la serie 1976-2016, constituyéndose en el récord de endeudamiento externo del país. La deuda externa de Macri superó a la contraída por la dictadura en el marco de la guerra de Malvinas, momento en el que la deuda externa pública se incrementó en 21,4 mil millones de dólares. También superó el pico de endeudamiento de la gestión de Alfonsín (15 mil millones de dólares en 1987), el de Menem (U$ 12,4 mil millones en 1994) y el de la primera Alianza (U$ 4,6 mil millones en 2001)[4]. Desde la llegada de Mauricio Macri al gobierno, la deuda externa (sin el crédito del FMI) asciende a U$ 253.741 millones de dólares. En el mismo período, se fugó más del 34% de las divisas que entraron, lo que se conoce como bicicleta financiera: U$ 88.084 millones de dólares[5]. En otras palabras, 84 de cada 100 dólares que ingresaron al país, se fugaron con la complicidad de los CEOS del gobierno. Este es y será el gobierno que ha recibido del Fondo Monetario Internacional el mayor préstamo de todos los tiempos, en todo el mundo, cuando -en forma paralela- alcanza el récord de riesgo país, la baja de los bonos soberanos, la caída del PBI y el hundimiento del consumo masivo. Ya es un secreto a voces el default inminente que más tarde o temprano sobrevendrá.

Las constantes megadevaluaciones de la moneda nacional generaron un cambio drástico en el escenario económico. Una de las consecuencias ha sido la aceleración del proceso inflacionario a partir de la “crisis cambiaria” que comenzó en abril y que alcanzó una dinámica equivalente a la observada en 2002. El único actor que puede intervenir para detener el círculo perverso devaluación-inflación-recesión, es el Estado con políticas contracíclicas, pero no es el caso de Argentina que vive bajo este modelo neoliberal y conservador. Antes bien, la Alianza Cambiemos se beneficia y congratula de ello. Se escucha: «Hay mejoras en el frente fiscal que no se pueden anunciar porque nos perjudicaría en lo político, como por ejemplo la caída del salario real»[6] o luego de que el dólar llegara a los $42, “Creemos que el tipo de cambio que tenemos es competitivo” dicho como un logro de gobierno[7].

Desde que asumió Macri, la desocupación se incrementó un 70% (5,8% en 2015 y 9,6% en 2018[8]). En los primeros 6 meses del 2018, se perdieron 106.200 puestos de trabajo[9] (en toda la gestión Cambiemos 700.000). La industria perdió unos 25.000 empleos en blanco (23%: este sector ha perdido desde 2016, unos 82 mil puestos laborales). En el segundo trimestre del año en curso, la tasa de desempleo subió al 9,6% de la PEA (Población Económicamente Activa). El indicador informado por el INDEC es el más alto de los últimos 12 años, ya que sólo fue superado por el registro correspondiente al primer trimestre del 2007 de 9,8%[10]. La desocupación total supera los 2 millones de personas mientras que la subocupación afecta a más de 2,5 millones. Por otra parte, la tasa de ocupados demandantes de empleo subió al 16% y la presión de esa demanda sobre el mercado de trabajo creció al 31,9%[11]. En total -por uno u otro motivo- 7 millones de personas hoy tienen problemas de empleo y se consolida un esquema económico basado en la precarización laboral y la baja de los salarios reales.

Argentina en 2015 ocupaba el primer lugar en la escala del salario mínimo en dólares en la región (u$s589), dos años y medio después retrocedió al séptimo lugar (u$s263). Así, el Salario Mínimo local se redujo en más de un 50% en dólares[12]. La misma suerte corrieron las jubilaciones mínimas (fueron las más altas de la región), las que en el primer récord de la corrida cambiaria del 29 de junio de 2018, al cotizar a $29, perdió casi el 40% de su poder adquisitivo. Si tomamos la “canasta de jubilados”, el Defensor de la Tercera Edad, Eugenio Semino, denunció que el 70% de los jubilados no alcanza a cubrir los gastos de la canasta Básica para Adultos Mayores y Jubilados que, de acuerdo a datos de la entidad tiene un costo de $21.127, siendo la mínima de $9.309[13].

Luz, agua y gas, aumentaron en la era Macri -en promedio- un 2.057%, mientras que los salarios subieron un 77% en el mismo período, pero contra una inflación del 129%. El costo de la canasta de servicios básicos -en relación al SMV (Salario Mínimo, Vital y Móvil)- registró entre 2015 y 2018 un incremento del 250%. En 2015, el peso de dicha canasta con respecto a los ingresos mínimos, era del 6%. En 2016 pasó a ser del 17% y hoy llega al 24%[14]. Se mantuvieron estables para enfrentar el año electoral para luego desencadenar un nuevo tarifazo a finales del año citado. Partiendo de ser el país de América Latina con el menor costo de los servicios básicos públicos, pasamos a ocupar el tercer lugar en la región en tan sólo 33 meses. Desde enero de 2016 los argentinos pagamos fortunas por los servicios básicos. La electricidad hasta ahora, acumula una suba de 2.136%. El gas, acumula un alza promedio de 3.008%[15]. En el agua, el aumento acumulado desde diciembre del 2015, ha sido del 956%[16]. La Defensoría del Pueblo de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, estimó -en la última Audiencia Pública- que “una familia destina más del 50% de sus ingresos al pago de servicios públicos esenciales”[17] y manifestó que hizo su aparición en Argentina un nuevo fenómeno: el de la “pobreza energética”: cuando una familia gasta más del 10% de sus ingresos en pagar la energía. Los hogares de bajos recursos, en 2017, destinaban el 25% de sus ingresos al pago de las facturas de servicios.  En el país, luego del aumento demencial desde enero de 2016, decidido por el actual gobierno (vía quita de subsidios y dolarización de las tarifas), se advierte que la pobreza energética observada en los deciles 1 y 6 es extrema[18].

En cuanto al valor de las canastas, el INDEC estableció que la CBA (Canasta Básica Alimentaria) para el hogar tipo 2 es de $10.123, en tanto que la CBT (Canasta Básica Total) para el mismo hogar tipo 2 es de $25.206[19]. Asimismo, el INDEC informó este mismo mes que el índice de desocupación llegó al 9% (donde el 90% de los trabajadores gana menos de $ 20.000 por mes, donde 8 de cada 10 trabajadores en «negro» gana menos de $13.000, donde el salario medio de los trabajadores informales es de $9.600 mensuales) y que la mitad de los argentinos vive con menos de $8.200 por mes[20]. Aclarado esto, pido disculpas al lector/ra por haber abusado de cifras. No tengo otro modo de analizar críticamente el tema de este escrito: la pobreza.

POBREZA

“Señor, no sabemos adónde vas.

¿Cómo vamos a conocer el camino?”

“Yo soy el camino, la verdad y la vida”

Pero yo os digo

“Este es el camino, no hay otro”

La Biblia según Miauricio Macri

Una breve aclaración: no me he basado en los informes del Observatorio de la Deuda Social Argentina de la UCA, por compartir las críticas metodológicas que recibe a diario respecto del sesgo muestral de sus informes[21] y por estar subordinado a la línea editorial del Diario La Nación, ya que la Fundación La Nación, es su sponsor mayoritario. El Observatorio de la UCA ha demostrado -a través de sus informes- participar del asedio comunicacional dominante contra el gobierno anterior mediante un “periodismo de guerra”[22] y como ya se sabe, en toda guerra la primera víctima es la verdad.

Respecto del INDEC, quienes hoy perpetran el mayor saqueo económico del país (justificado en “La Pesada Herencia K” o la “Corrupción K”) gracias al blindaje de los medios hegemónicos, hicieron gala de su eficacia simbólica[23]. Puesto en duda como mero “legitimador del relato kirchnerista” y “fabricante de estadísticas falsas”[24], la nueva gestión no sólo produjo un “apagón estadístico”, también modificó metodologías. El primer informe del INDEC sobre “pobreza” en el gobierno de Cambiemos, dio un 30,3% de pobreza, pero enfatizó la “adulteración” de los datos durante el último tramo del gobierno de CFK. INFOBAE llegó a decir la barbaridad de que Cristina “había ocultado 9 millones de pobres”[25]. El INDEC corroboraba al sistema de medios hegemónico, los números que Macri había dado en campaña y que estaban basados en los datos de la UCA. Sin embargo, el discurso del gobierno -fuera de las fronteras- desmentía lo que sustentaba oficialmente aquí dentro: “6% de desocupación y el coeficiente de Gini (que mide la desigualdad social) más bajo de la región”[26]. No fue casualidad que ese primer índice de pobreza de Macri “fue el que dejó Cristina” (dicho por La Nación 16 meses antes que lo informara el titular del INDEC, Jorge Todesca)[27]. Tampoco fue casualidad que la denuncia judicial contra Guillermo Moreno fuera iniciada (hace 11 años) por los entonces senadores Gerardo Morales y Ernesto Sanz basada sólo en “recortes periodísticos”.

Con todos estos elementos en mano, pregunto, ¿a qué viene el sincericidio del Ministro Dujovne al proclamar que «Nunca se hizo un ajuste de esta magnitud sin que caiga el Gobierno»? Es decir ¿por qué en este estado de las cosas aun no ha caído el gobierno? Entre muchas otras cosas , por el blindaje mediático que cubre al gobierno y la catástrofe social que ha generado. Sólo así se entiende que las cifras que circulan, indican sólo 2 millones más de pobres. Sólo bajo estas condiciones se pueden leer los números del INDEC y la UCA  que sólo encuentren el “dato mágico” acerca de la pobreza, ubicándola alrededor del 30% (¡Oh casualidad! el mismo índice de pobreza que ellos dicen que dejó Cristina)

OTRA MIRADA, OTRA PERSPECTIVA

Gracias a la legitimación mediática del “relato macrista” -esto es, sin el envoltorio retórico del aparato comunicacional de dominación más poderoso del que se tenga historia[28] – no habría sido posible un resultado axiomático, real y efectivo sobre el futuro y sobre el pasado. Ya lo dijo Goerge Orwell “quien controla el pasado, controla el futuro, quien controla el presente, controla el pasado”. Es aquí donde radica la eficacia simbólica de un discurso de dominación que ya no se pone en discusión y que hace casi imposible su interpelación. Hay una “voluntad de verdad” en el sentido postulado por M. Foucault, la que no es otra cosa que una justificación para aplastar y dominar, para exigir conformidad y sumisión. Las frases del Presidente (cuando el dólar llegó a $44, cambió su gabinete y envió una delegación al FMI) “este es el camino y no hay otro”, “tenemos que terminar con 70 años de engaños y de frustraciones”[29],  son la incongruencia de esta época. Y aquí, Borges. La imagen que devuelve el espejo (los medios de comunicación) parece llena, pero está vacía. Vacía de sentido, vacía de política, vacía de futuro.

El INDEC mide “pobreza por ingresos”. En apretada síntesis, contrasta los ingresos de un hogar vs el valor de una canasta básica (alimentaria y total). Los datos se refieren a una familia TIPO. ¿Qué se considera una familia TIPO?: un matrimonio treintañero y dos niños en edad escolar, lo que figura en los informes como “grupo 2”. Toma como unidad de medida de referencia a los varones entre 30-60 años, considerados «adultos equivalentes». De allí que un adolescente varón equivale a 1,04 adultos equivalentes. Un bebé recién nacido a 0,35 adultos equivalentes. Una mujer de 32 años a 0,77 adultos equivalentes.

Veamos un ejemplo: vamos a calcular (de acuerdo a la metodología del INDEC) la canasta básica para una mujer jubilada de 70 años de edad, que percibe una jubilación mínima y que vive sola.  Para el INDEC, esa mujer equivale a 0,67 adultos equivalentes. ¿Cómo sacamos la cuenta para saber cuánto debe percibir esa mujer del ejemplo? Buscamos en el último Informe del INDEC en el apartado “condiciones de vida” los resultados mensuales expresados por adulto equivalente. Para el mes de noviembre de 2018, la Línea de Indigencia  está trazada en los $3.276,02 y el valor de la Línea de Pobreza es de $8.157,29. Como lo que estamos buscando es saber el monto en pesos que una mujer de 70 años que vive sola, necesita para superar los umbrales de indigencia o pobreza, realizamos el siguiente cálculo basado en una regla de tres simple: a) un adulto equivalente necesita $3.276,02 para no ser indigente, b) nuestra jubilada equivale a 0.67 adultos equivalentes, c) por lo tanto, nuestra jubilada necesita $2.194 mensuales para no ser indigente y $5.465 para no ser pobre. Si nuestra jubilada cobra la mínima de $9.309, para el INDEC no es ni pobre ni indigente.

No es ni pobre ni indigente porque el precio último de la Canasta Básica Alimentaria ($10.123) y el de la Canasta Básica Total que es de $25.206 son para un hogar de cuatro miembros como ya expliqué. Si una sola persona perciba $9.000, según el INDEC, está sobrada.

De este modo, hay que entender la pobreza medida por el INDEC. Nuestra subjetividad nos dice otra cosa: que hay más pobreza que antes. Mucha más. Luis Brandoni puede darse el lujo de decir que “la calidad de vida de la gente más necesitada mejoró notoriamente” o Dante Sica afirmar que “en los sectores más bajos el consumo no cayó” y sandeces por el estilo. Claro, el INDEC los respalda. ¿Por qué? Porque no suman los 5 millones de jubilados que cobran la mínima. Ni tienen en cuenta los 4 millones de beneficiarios de AUH ni el millón de pensionados por invalidez no están ni el millón de beneficiarios PUAM y SIPA. Sumados todos ellos, la cifra de la pobreza me está dando 11 millones de argentinos. ¿Cuento aquí los 2 millones de desocupados? ¿Cuento los 7 millones de subocupados y precarizados? Si es así, la suma me está dando 20 millones de argentinos. ¿Quién puede soportar la cifra de 5,6 millones de niñas y niños pobres que informé en este mismo medio?

Con la divulgación a los cuatro vientos de todas esas cifras manipuladas y herméticas ¿Quién se atreverá a creer que más de la mitad de los argentinos fueron empobrecidos por este gobierno?

El colmo sería que la respuesta a estos interrogantes, la sociedad la esperase por parte de los medios hegemónicos para -recién ahí- tomar conciencia. Mientras tanto, parafraseando a Benjamin, les recuerdo que el enemigo no ha parado de vencer.

 

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Referencias:

[1] BORGES, J.L. Historia de la eternidad. Emece, Bs. As. 1971.

[2] UNDAV. La suba del precio de los alimentos encuentra distintas causas: la quita de las retenciones al trigo, al maíz y la soja (la baja de los impuestos a las exportaciones agropecuarias tiene un impacto directo en el precio de los productos derivados de estas materias primas ya que se traslada el precio internacional a los productos que se comercializan en el mercado interno); la devaluación; la suba de tarifas y los aumentos de los combustibles (ambos precios dolarizados).

[3] MUSCATELLI, N. “Los alimentos subieron este año por encima de la inflación. Clarín, Bs. As. 17 de octubre de 2018.

[4] BASUALDO, E. y MANZANELLI, P. “Endeudar y Fugar. Un análisis de la historia económica de Argentina de Martínez de Hoz a Macri”. Ed Siglo XXI. Bs. As. 2017.

[5] ODE / UMET. Observatorio de la Deuda Externa y Universidad Metropolitana para la Educación y el Trabajo. “Undécimo Informe de la deuda Externa”. Bs. As. Abril de 2018.

[6] BONELLI, Marcelo. Clarín, 23-08-2018. Mario Quintana (ex vicejefe de gabinete y gestor del gobierno en los mercados financieros internacionales), con aquella frase, admitió en Wall Street que el Gobierno apuesta a la caída del salario real para poder afrontar la baja del déficit fiscal prometida al Fondo Monetario.

[7] Clarín, 6-09-2018. Macri afirmó ante los gobernadores en Mendoza que luego de las consabidas “tormentas” el precio del dólar se ha transformado en la ventaja cambiaria más elevada desde diciembre de 2007 (mientras la devaluación del peso en un 105 % recortó a la mitad el valor salarial entre esos mismos días del supuesto “éxito”).

[8]  H. Cámara de Diputados de la Nación – Sesión 24 de Octubre de 2018. Intervenciones del Dip. Kicillof, A.  y Vallejos, F.

[9] Frente Sindical para el Modelo Nacional. Corriente Federal de Trabajadores. Declaración Ferro: “La Patria está en Peligro”. Bs. As. 20 de septiembre de 2018.

[10] AMBITO.COM. “Creció la desocupación al 9,6 en el segundo trimestre”. 20 de septiembre de 2018.

[11] INDEC. Informes Técnicos Vol. 2 Nº178. Trabajo e Ingresos Vol. 2 Nº6. Segundo Trimestre 2018. Bs. As. Septiembre de 2018.

[12] “En  reiteradas ocasiones se escucharon comentarios y declaraciones de actuales funcionarios sosteniendo que el salario en dólares de los trabajadores argentinos estaba muy por arriba de la media de la región, y que eso era fruto de una distorsión de la política económica”. Basta recordar la frase de Macri “los salarios son un costo más”. Así, lo lógico sería “normalizar” ese fenómeno. “El camino más corto para lograrlo es una suba de los precios de los bienes y servicios de la economía (incluido lógicamente el dólar) de tal magnitud que las subas salariales quedaran muy por debajo, logrando así el cometido. Desde esta perspectiva la problemática de la inflación no es un error de la política económica, sino un objetivo (se sabe que los trabajadores son difíciles de quebrar en permitir una rebaja en los salarios nominales). Dicho proceso es el fenómeno que permite transferir ingresos de un sector social a otro”. UNDAV. Universidad Nacional de Avellaneda. Observatorio de Políticas Públicas. “Inflación en Argentina”. Bs. As. Septiembre de 2018.

[13] TELESURTV. Noticias/América Latina “El 70% de los jubilados argentinos no puede cubrir sus gastos”. 20 de agosto de 2018.

[14] UNDAV. Observatorio de Políticas Públicas (24% del SMVM). La Nación (20% del gasto en servicios afecta a los hogares de bajos recursos)

[15] Centro CEPA. Diciembre de 2018.

[16] MinutoUno.com. Jueves 11 de octubre de 2018.

[17] AMOR, Alejandro. Defensor del Pueblo de la CABA. Exposición en la Audiencia Pública del Agua, Centro Metropolitano de Diseño de Barracas. Publicado en Nuestras Voces, 19 de Marzo de 2018.

[18] ENNIS, Belén. “Tarifazo eléctrico y Pobreza Energética”. OETEC / Observatorio de la Energía, Tecnología e Infraestructura para el Desarrollo. Bs. As. 10-02-2016 y “El empobrecimiento energético del pueblo argentino”, OETEC, Bs. As. 2-03-2017.

[19] INDEC. Informes Técnicos. Vol. 2 N 235. Condiciones de Vida. Vol. 2 N 16. Valorización mensual de la canasta básica alimentaria y de la canasta básica total. Gran Buenos Aires. Bs. As. Noviembre de 2018.

[20] INDEC. Informes Técnicos. Vol. 2 N 236.Trabajo e Ingresos. Vol. 2 N 9. Mercado de trabajo. Tasas e indicadores socioeconómicos (EPH).Tercer Trimestre. Bs. As. Diciembre de 2018.

[21] CESO. Centro de Estudios Económicos y Sociales Scalabrini Ortiz. “La discusión metodológica sobre la estimación de la pobreza”. Informe Económico Especial Nº III. Bs. As. 2014. ZAIAT, A. Panorama Económico, “Ensalada”. Página 12, Bs. As. 14 junio de 2014. LOPEZ, A. “La UCA contra el mundo”. Perfil, Bs. As. 18 de julio de 2015.

[22] FIGUEROA, J. “Armas de manipulación masiva”. Revista El Abasto. Bs. As. 25 de Junio de 2013.

[23] KANENGUISER, M. “Terminan nueve años de oscurantismo en las estadísticas del INDEC”. La Nación, Bs. As. 15 de junio de 2016.

[24] MACRI, M. “La política no es el escenario en que algunos líderes mienten para engañar a la gente y al mundo con datos falsos”. Discurso de asunción presidencial. 10 de diciembre de 2015. La Nación, Bs. As. 10 de diciembre 2015.

[25] GASALLA, J. “El INDEC puso fin a un apagón estadístico que ocultaba 9 millones de pobres”. INFOBAE. Bs. As. 28 de septiembre de 2016.

[26] PERTOT, W. “Una herencia que no era pesada” (Argentina: Land of Opportunities). Página 12. Bs. As. 17 de abril de 2016.

[27] La Nación. “Casi un 30% de los argentinos es pobre, según un informe de la UCA”. Bs. As. 14 de junio de 2015.

[28] MEDINA, W. “Con Mauricio Macri y sus medios afines, la mentira se hace verdad”. Nuevatribuna.es, España, 14 de marzo de 2018. “Pew Research, el mayor centro de investigación sobre tendencias de opinión pública en los Estados Unidos, coloca al periodismo argentino entre los seis peores del mundo”…” “la cruzada pro gobierno neoliberal que comenzó mucho tiempo antes de que el empresario Mauricio Macri lograra la presidencia argentina. Las artimañas de los medios conservadores fueron las mismas que se utilizaron contra gobiernos progresistas en otras regiones de América Latina. Las operaciones mediáticas para erosionar al gobierno anterior desde la opinión pública, incluyeron ficciones audiovisuales. Sin embargo el aparato comunicacional del poder es tan amplio que aún puede jactarse de ser el dueño de la verdad; de modo que logra mantener fuera del alcance de la opinión pública los escándalos de corrupción y el desastre económico de la actual administración”.

[29] Mauricio Macri. Tercera edición, Jornada Nacional del Agro (JONAGRO) Confederaciones Rurales Argentinas (CRA), 13 de septiembre de 2018.

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