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Trilogía sobre el Amor: Erótica China
“Deben amarse los unos a los otros
pero no saben cómo”
Ferenczi
Por Gonzalo Dominguez
¿Por qué dedicar tres textos al amor y volverlos tri/logía? De distintos modos podemos tomar la terceridad en una relación “de dos”: objeto de celosía, divinidad bautizante, suegrx obstaculizadorx, adicciones fuera del Otro, liderazgos narcisistas, etc. ¿Qué son todos estos “afueras” de la pareja que originan los desencuentros garantizados?
La ilusión de que el otro sea (de) uno, el rechazo a eso que no “gusta”, la espera de que haga algo que no hace, junto con las posibles consecuencias infantes de estos estorbos: la vuelta al refugio cómodo con el Otro donde soy lo que soy y vos (el amor) no rompés los puentes.
¿Qué es el amor? ¿Qué papel juega “la propia identidad” allí? ¿Cómo es posible sortear defensas ante la irrupción de la diferencia insoportable?
En este primer capítulo tomaremos algunos indicios de la poesía tradicional china a fin de sintonizar posibles cualidades erótico-amorosas entre ambos campos del abismar.
En la poesía china hay una frecuencia relevante asociada a la escasa nominación desde “el yo”, este pronombre que se encadena en su uso social a alguna supuesta sustancia llamada persona no es casi escrito en el espacio-poema. El objeto creado por el sujeto es el sujeto “siendo” el objeto, se atraviesan ambos de modo tal que la différence es solo una: la obra, como singularización del origen compartido.
… Todas las gotas de lluvia suben del mismo cielo …
La comunión con el universo es piedra fundamental desde el método mismo, en donde, el vaciamiento y la conjunción de polaridades ingresan en la marea del fluir con toda la naturaleza. Este es el modo del crear. ¿Este es un modo del amor? ¿del amor? ¿un modo?
Otro rasgo prístino es el vacío, que no por nada lo agregamos luego del “fluir”. ¿Cómo la materia (cuerpo) podría atra(b)esar otra materia si (por lo menos en una) no hay un lugar vacío donde fluir con lo que se encuentra? es lo que se conecta con otro maravilloso recurso poético “espejante”: el paralelismo. La importancia de este es que introduce dos caminos:
¿Lo ven? ¿Lo pueden ver? ¿Al amor?
Imagen de portada: Xul Solar – La pareja
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